Es fundamental conocer las distintas formas de violencia y las medidas que puedes tomar si las sufres. La violencia en el entorno familiar abarca algo más que el daño físico; se extiende a comportamientos que infunden temor por tu seguridad o la de los miembros de tu familia. Algunos ejemplos son el maltrato físico, que implica actos violentos o amenazas; el abuso sexual o la agresión sexual que implica actividades sexuales no deseadas; el abuso verbal o emocional, como amenazas o control coercitivo; el abuso social dirigido a aislarte; y el abuso financiero, que limita tu acceso a recursos económicos.
Si se encuentra en peligro inminente, marque el 000 para ponerse en contacto con la Policía, que está preparada para ayudarle en casos de emergencia en los que su seguridad esté en peligro. Además, hay servicios gratuitos de asesoramiento telefónico a través del 1800RESPECT. Recuerde que su seguridad es primordial y que la violencia doméstica y familiar se toma muy en serio.
Es importante señalar que, a pesar de las amenazas que pueda hacerle su pareja, no puede anular su visado. Si estás a salvo pero has sufrido violencia doméstica y familiar, puedes notificar al Departamento cualquier cambio en tu situación sentimental, aportando pruebas de tus circunstancias.
No está solo en esto. Busca el apoyo de los agentes de migración australianos, que pueden ofrecerte orientación y asistencia adaptadas a tu situación. Es esencial reconocer los signos de violencia doméstica y tomar medidas para protegerte a ti y a tus seres queridos.